No quiero llorar

Es triste. Muy triste. Sé que me estoy matando a mi misma, pero lo hago. Sé lo que va a causarme, pero sigo haciéndolo. Y trato de estar bien. Me siento orgullosa de serme sincera.
Pero por la noche... La noche lo cambia todo, ¿no? Es un tristeza en el medio del pecho, un frío intenso en mi nuca. Quisiera detener este sentimiento, pero no puedo. Como ya he dicho, no controlo mi manera de sentirme.
Sé que no estoy realmente GORDA (odio esa palabra), pero sé que lo estoy. Sé que esto me hace mal, pero me hace bien. Sé que esto me hace sentir mal, pero haciéndolo me siento bien.
Y lloro. Simplemente lloro. Subo a la balanza y me siento feliz por ese medio kilo menos, y me entristezco pensando que debería haber bajado un poco más, pero me derrumbo cuando pienso en lo qu estoy haciendo, en el punto al que llegué. Pienso en el día que dejé de comer, y en por qué lo hice. ¿Hasta dónde voy a llegar? Por ahora sigo saludable, pero, ¿cuánto tiempo más?
Y sigo llorando. Quiero pesar menos. No quiero usar ropa grande, quiero que mi ropa actual me quede grande, aunque eso signifique sacrificar mis curvas y mis formas de mujer. Quiero ponerme un pantalón que para mi siempre fue ajustado y sentir que se me cae, que me va grande. Quiero subir a una balanza y que esta no llegue a un numero alto, a un numero que me haga sentir GORDA.
No quiero llorar. Es horrible. Daría lo que fuera por no llorar. Sobre todo porque soy una princesa, perfecta en todos sentidos, pero al llorar... Las princesas no lloran, eso las hace imperfecta. Y yo lloro por mi peso. Mi peso me hace imperfecta.
Pero yo no quiero llorar.

Princesa Vampira♥